El Ayuntamiento de Zaragoza ha iniciado un contrato menor para la creación de un banco de imágenes que permitirá identificar grafitis mediante inteligencia artificial (IA). Esta iniciativa, gestionada por el Servicio de Limpieza Pública y Gestión de Residuos, busca analizar las pintadas en equipamientos municipales y elaborar un diagnóstico técnico sobre su impacto.
El estudio contempla la recopilación de datos visuales, el análisis de casos concretos y la elaboración de un informe que facilite la identificación de autores reincidentes a través de técnicas de reconocimiento caligráfico. El objetivo es diseñar estrategias preventivas y correctivas, además de colaborar con la Policía Local en la persecución de actos vandálicos.
En paralelo, se ha adjudicado otro contrato para aplicar nanotecnología en la protección de fachadas, con un tratamiento ecológico que permite limpiar grafitis sin productos químicos ni maquinaria especializada. Las zonas seleccionadas incluyen el acceso al parque Castillo Palomar y varios centros deportivos municipales (CDM).
El consistorio destina más de un millón de euros anuales a la limpieza de grafitis, con una media de 90 intervenciones diarias, lo que evidencia la magnitud del problema y la necesidad de soluciones innovadoras.


