A partir del 3 de abril de 2025, entrará en vigor en Aragón una modificación de la Ley de Propiedad Horizontal que otorga a las comunidades de vecinos mayor control sobre las viviendas de uso turístico. Esta medida tiene como objetivo frenar el crecimiento descontrolado de los pisos turísticos en zonas residenciales y mejorar la convivencia vecinal.
Según la nueva normativa, cualquier propietario que desee destinar su vivienda al alquiler turístico deberá obtener la aprobación de al menos tres quintas partes de la comunidad de propietarios. En caso de incumplimiento, las sanciones pueden alcanzar hasta 600.000 euros, dependiendo de la gravedad de la infracción y de la comunidad autónoma.
Es importante destacar que esta normativa no tiene carácter retroactivo; las viviendas turísticas que ya operaban antes del 3 de abril podrán continuar su actividad sin necesidad de obtener una nueva autorización.
Esta medida responde a la creciente preocupación por la proliferación de viviendas de uso turístico y su impacto en la convivencia vecinal. Al otorgar a las comunidades de propietarios un mayor control sobre estas actividades, se busca garantizar un equilibrio entre el desarrollo turístico y el bienestar de los residentes locales.
