El Ayuntamiento de Huesca ha inaugurado esta mañana el nuevo aparcamiento disuasorio de la calle Pilar Lorengar, una infraestructura clave para mejorar la movilidad en la ciudad y reducir la contaminación. La obra, ejecutada por Hormigones Grañén, S.L., ha contado con una inversión de 536.347 euros y un plazo de ejecución de cuatro meses.
Este aparcamiento, que forma parte de un plan más amplio con tres zonas de estacionamiento disuasorio, busca facilitar el acceso a la ciudad sin saturar el casco urbano. Además, su uso será gratuito, en compensación por la pérdida de plazas de aparcamiento derivada de la construcción del carril bici en la zona.
Con 190 plazas, incluyendo 6 accesibles, puntos de recarga para coches eléctricos, aparcamientos para bicicletas y zonas verdes, el nuevo espacio está diseñado para fomentar el uso de medios de transporte sostenibles. La pavimentación combina asfalto y césped armado, un enfoque que responde a criterios estéticos y ecológicos.
Además de mejorar la movilidad en horas punta, el proyecto busca reducir la contaminación atmosférica y promover el uso del transporte público y la bicicleta. Para ello, se instalará un panel turístico con información sobre rutas y senderos cercanos, incentivando el turismo sostenible.
La financiación de este aparcamiento proviene de los fondos NextGeneration de la Unión Europea, dentro del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, lo que refuerza el compromiso de Huesca con la sostenibilidad y la modernización de su infraestructura urbana.
Con esta iniciativa, Huesca avanza hacia una ciudad más accesible, ecológica y adaptada a las necesidades de movilidad del siglo XXI.