Este fin de semana, Calatayud se convierte en el epicentro del aragonesismo en el exterior, con la celebración del 46º Encuentro Anual de la Federación de Comunidades Aragonesas del Exterior. Más de 1.200 personas de 53 Casas y Centros se reúnen para compartir cultura, tradiciones y fortalecer los lazos con Aragón.
Un evento para celebrar la identidad aragonesa
La inauguración contará con la presencia de la vicepresidenta del Gobierno de Aragón, Mar Vaquero, el alcalde de Calatayud, José Manuel Aranda, y el presidente de la Federación de Comunidades Aragonesas del Exterior, José Antonio Lázaro. El acto central será en la Iglesia de San Pedro de los Francos, presentado por el periodista y vicepresidente de la Federación, Cosme García.
Además, durante la ceremonia, se otorgarán los premios “Aragoneses de Mérito”, que reconocen a destacados representantes de la sociedad aragonesa:
- Hermandad del Santo Refugio, en la categoría Social.
- Nacho del Río, reconocido jotero, en la categoría Artes.
- Pablo Abián, jugador de bádminton, en la categoría Deportes.
Actividades culturales y folclóricas
Desde este viernes, la programación del evento ofrece diversas actividades culturales y turísticas, entre ellas:
- Conferencia sobre historias y leyendas de la Comunidad de Calatayud, impartida por José Antonio Adell.
- Visitas guiadas organizadas por el Ayuntamiento para descubrir la riqueza patrimonial bilbilitana.
- Festival folclórico en el Recinto Ferial, con la participación de grupos de jotas y rondallas de las Casas y Centros Aragoneses.
El domingo, la jornada comenzará con una diana floreada, seguida de una misa en la Iglesia de San Juan el Real, cantada por el Grupo del Centro Aragonés de Hospitalet, y presidida por el obispo de Tarazona, Vicente Rebollo. El encuentro culminará con una comida de hermandad en el Recinto Ferial, simbolizando el compromiso y unión entre los aragoneses residentes fuera de la comunidad.
Un vínculo que trasciende fronteras
El Encuentro Anual refuerza la conexión entre Aragón y sus comunidades en el exterior, promoviendo la preservación de la identidad aragonesa y el intercambio cultural. Este evento se consolida como un referente para la diáspora aragonesa, manteniendo vivas sus raíces y fortaleciendo la relación con su tierra de origen.
