El Banco de España ha publicado un informe en el que pone de manifiesto la creciente dificultad de las generaciones más jóvenes para acceder a la vivienda en propiedad. El estudio, basado en la Encuesta Financiera de las Familias, evidencia que la tasa de propietarios ha disminuido drásticamente entre los menores de 35 años en comparación con generaciones anteriores.
Según los datos presentados en febrero de 2025, el 32% de los hogares cuyo cabeza de familia es menor de 35 años posee una vivienda en propiedad. En contraste, hace más de una década, esta cifra se situaba en el 69%. La tendencia muestra que, a medida que han pasado los años, la capacidad de los jóvenes para adquirir una vivienda se ha visto reducida debido a múltiples factores, entre ellos el aumento del precio de la vivienda, la precariedad laboral y la dificultad de acceso a financiación hipotecaria.
El informe destaca que más del 81% de las personas nacidas entre 1945 y 1965 eran propietarias de su vivienda a los 42 años. Sin embargo, esta cifra cae al 67% entre los nacidos entre 1975 y 1985 y desciende aún más en las generaciones posteriores. Además, esta brecha en el acceso a la vivienda también ha impactado en la acumulación de riqueza. Mientras que las generaciones nacidas alrededor de 1960 alcanzaban una riqueza neta mediana de aproximadamente 200.000 euros a los 45 años, aquellos nacidos en torno a 1980 apenas superaban los 107.000 euros.
Ante esta situación, el Banco de España advierte sobre las implicaciones económicas y sociales de esta tendencia, que podría derivar en mayores desigualdades patrimoniales a futuro. En este contexto, se plantea la necesidad de impulsar políticas que faciliten el acceso a la vivienda para los jóvenes, como incentivos fiscales, mayores ayudas al alquiler o medidas que favorezcan la concesión de hipotecas.
Este informe refuerza la preocupación por la creciente brecha generacional en términos de patrimonio y acceso a la vivienda, lo que podría tener consecuencias en el mercado inmobiliario y en la economía española en los próximos años.