La comunidad autónoma de Aragón afronta este fin de semana un episodio meteorológico adverso caracterizado por la combinación de altas temperaturas y tormentas intensas, según ha informado la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). El conjunto del territorio permanece en alerta amarilla, con especial atención en comarcas del norte y centro.
Durante este viernes 4 de julio, Aemet ha previsto precipitaciones intensas que podrían alcanzar los 20 litros por metro cuadrado en una hora en zonas como el Pirineo y las Cinco Villas. Además, se esperan tormentas acompañadas de granizo y fuertes rachas de viento en áreas como el centro y sur de Huesca, Albarracín-Jiloca, Gúdar-Maestrazgo, la Ibérica zaragozana y la Ribera del Ebro.
La situación se complica con un aumento notable de las temperaturas máximas, que rozarán los 37 grados en el sur de Huesca y la Ribera del Ebro. En el resto del territorio, los valores oscilarán entre los 34 y 36 grados, especialmente en el Bajo Aragón, el centro de Huesca y los valles pirenaicos. Las mínimas nocturnas se mantendrán anormalmente altas, dificultando el descanso.
Ante esta doble alerta, Protección Civil ha emitido una serie de recomendaciones dirigidas a la población: evitar la exposición prolongada al sol, mantenerse hidratado, extremar la precaución en desplazamientos y actividades al aire libre, y seguir la evolución del tiempo a través de canales oficiales.
Este episodio pone a prueba la capacidad de respuesta ante fenómenos cada vez más frecuentes debido al cambio climático. Las autoridades insisten en la importancia de la prevención y la concienciación ciudadana para reducir riesgos y proteger especialmente a los colectivos más vulnerables, como personas mayores, niños y quienes padecen enfermedades crónicas.
El aviso se mantendrá activo hasta el sábado, aunque no se descarta que pueda prolongarse o elevarse de nivel si la situación empeora. Aemet continuará actualizando sus previsiones a lo largo de la jornada.